Quería darle todo lo que tenía dentro.Necesitaba amarle,tocarlo,sentirle.
A veces imaginaba que le tenía sólo para ella,sin nada ni nadie entre los dos,y entonces su sonrisa iluminaba el día.
¡Sólos los dos!
Y sus manos inconscientemente buscaban el cuerpo de él para acariciarlo,y al no encontrar más que el vacío su tristeza apagaba las mañanas.
Y sabiendo que su amor era imposible,buscaba otros rostros,otros cuerpos,otras voces para olvidarle.
Jamás lo consiguió.
A veces imaginaba que le tenía sólo para ella,sin nada ni nadie entre los dos,y entonces su sonrisa iluminaba el día.
¡Sólos los dos!
Y sus manos inconscientemente buscaban el cuerpo de él para acariciarlo,y al no encontrar más que el vacío su tristeza apagaba las mañanas.
Y sabiendo que su amor era imposible,buscaba otros rostros,otros cuerpos,otras voces para olvidarle.
Jamás lo consiguió.
Esto sí que es un cuelgue imposible de superar.
ResponderEliminarMuy triste ¿no?
¡Ahí sí! Eso si que es el romanticismo en estado puro y encima hablando de sensaciones que muchos hemos experimentado.
ResponderEliminarMuy bueno. ¡Qué congoja!
El amor no correspondido...que sufrimiento,que dolor
ResponderEliminarGenial....entro aquí para evadirme un poco de mis problemas y me lo encuentro de cara!
ResponderEliminarPero quitando eso, está muy bien Carmen. Me ha llegado mucho....
Ups,Saúl.
ResponderEliminarSorry so much,pobret meu
Muy bonito.... y triste.
ResponderEliminarEsther
Por dog!!! Estoy leyendo un montón de relatos tristísimos!! QUe pasa??? Está nublado o qué????
ResponderEliminarPor lo demás, muy intenso. Muy bien.
Collons, que triste.
ResponderEliminarEs genial, pero..pero...sniff!!
Qué tristeza...
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