Roberto protestó: “¡250€ por cambiar el aceite!”. Al salir encontró 250€ y sonrió burlón. A las 6 recibió una llamada, su hermana había muerto inesperadamente.
Estaba hundido, llamó a Carla y fueron a cenar. En el bolsillo encontró 100€. ¿Cuándo había olvidado tanto dinero?
Al llegar a casa vio una ambulancia su padre había muerto de un infarto.
Un día llevó a su madre a comprar flores para las tumbas. Pagó con 90€ que encontró en la mesita, pensó que su madre los había dejado para tal fin. Cuando volvió al coche su madre estaba pálida e inmóvil.
Uhhhh, yo echo a correr si me pasa eso ahhhhh
ResponderEliminarjO!! Así no da gusto encontrar dinero!!! prrr(escalofrío)
ResponderEliminarShemba
Voy a dejar de hacer la primitiva. No sea que me toque y me quede más solo que la una.
ResponderEliminarBueeeeeno
ResponderEliminarMal sistema,si.
Que canguele
Virgen santa, que mal royo....
ResponderEliminar¡¡Jo!! ¡Vaya pago más extraño pog cada vida pegdida! Me has dejado con la boca abiegta.
ResponderEliminarVaya! Como en el Face estoy como Minette, te he largado el comentario a su estilo. ¡Lo siento!
ResponderEliminarMuy original e inquietante tu relato.
Cuanto más dinero más solos. Si os toca la lotería, repartid!!
ResponderEliminarO sea, que la hermana vale más que la madre.Mmmmmmmm...
ResponderEliminar¿Tiene familia numerosa? Es para ver si nuestro personaje se hace muy rico o no jijiji