LA PESCA
El ocaso sorprendió a padre e hijo sentados en el pequeño embarcadero con sendas cañas de pescar. Había paz en el ambiente y complicidad entre ambos.
- Papá, ¿puedo hacerte una pregunta?
- Naturalmente hijo, ¿de qué se trata?
- Ya sé que estos gusanos son un magnífico cebo para pescar, pero… ¿no crees que ya iría siendo hora de enterrar a mamá?
No veas con el niño, y anda que el padre. Sin comentarios.
ResponderEliminarPor dog! Gran golpe de efecto, ciertamente! Todo muy bucólico y tierno. Si vamos a ver hasta ecológico. Ains!
ResponderEliminarLa teniente sin palabras.
Je, vamos que ese hombre aprovechó to y toito de su mujer....
ResponderEliminaryo...muda..me quedé..
Mamma mia!! y yo que pensaba que te habías equivocado de mes! pedazo de micro, me ha encantado.
ResponderEliminarNo se puede decir más en menos.
ResponderEliminarSencillamente genial,y directo a las entrañas,como debe ser un buen gore
Jajajaja!!!
ResponderEliminarPep, eres un genio. Has mezclado de manera increible humor y terror. Ademas es casi un telegrama!!!!
FABULOSO. Me ha encantado.
Jose Manuel.
Caram tu....corto, muy micro y muy conciso.Y lo que es más...muy bestia!!!!!! Jojojojojojojojojo me encanta.
ResponderEliminarHay que ver Pep, que droga es la pesca, a juzgar por lo que nos cuentas je...je je
ResponderEliminarJajaajaajaaaaaaaaaaaa Es que Pep es único, joder con el cebo...jajajjaaaaaa
ResponderEliminarEres auténtico, querido.
ResponderEliminarBesotes de Linda, "don jevi"...je,je
Gracias a tod@s. Me siento muy halagado.
ResponderEliminarAinssss pero que a gusto me he reído!!!! Que macabros somos!!! jajajaja
ResponderEliminarShemba