(Improvisando...)
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Desquiciadas me gritaban, me suplicaban, me rogaban. No se arrodillaban pues carecen de piernas. No juntaban las manos en señal de oración pues tampoco las tienen.
Llorando de dolor me pedían, me imploraban, me clamaban; y no podían hacer nada pues son inertes...
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-Tranquilas- le dije. - Pronto vendrá el domingo y podréis descansar... Ya no habrán pantallas... ya no habrán sillas rotas... ya no habrá hilo musical...
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Y con la mano fría les regalé una caricia y un pequeño apretón... Lo agradecieron unos instantes, pero allí seguía el dolor.
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A mis queridas cervicales.
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:P
Shembala,felicidades por el toque humorístico.Me ha gustado mucho,de verdad.
ResponderEliminarJEJJE...y quantas veces hablo yo tambien con ellas...
ResponderEliminarvenga tu, que ya estamos a casi viernes...y pronto las tendras en descanso
jajaj
Fantástico. Me ha encantado, de verdad.
ResponderEliminarCréeme, te acompaño en el sentimiento.
ResponderEliminarY dices que la mano fría y un apretón...probaré, a ver que tal.
Por cierto, soy currilla, Urraca es el diminutivo que uso en blogger.