LLUVIA
Se sentía pequeña y banal pero había hecho tantas cosas en su vida; nadie las podía imaginar.
Una de las cosas más llamativas que hizo fue practicar la caída libre. La velocidad de la caída la deformaba, el viento incluso jugaba con ella corrigiendo el rumbo a su antojo. Cayó en el mar.
Se sumergió con los delfines, bailó entre las algas y conoció los abismos marinos. Se enamoró de una sirena de piel dorada, pero aquello, desde el inicio, fue imposible. Emergió a la superficie.
Viajó en un crucero de lujo, las luces la deslumbraron pero no era lo que buscaba. Prefirió navegar en una humilde barca y ver faenar a los pescadores. Estuvo al lado de ellos padeciendo el duro trabajo. Llegó a puerto.
Paseó entre los amarres, pero se veía encerrada, volvió a la mar. Una gaviota se posó sobre ella y la llevó a la orilla. La noche era fría, pero no sabía que cuando llegara el calido día ascendería para quizá volver a ser lluvia.
Realmente bonito, Shemby. Tanta importancia que nos damos y una simple gota de lluvia a vivido mucho más que nosotros.
ResponderEliminarMás, más, más....
OooOOOooOOoh!!
ResponderEliminarQue bOnito,Shembalica :)
Quisiera ser gota para ver lo que ella ha visto :) Precioso
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