Pasaba por las calles y las encontraba vacías aunque estaban llenas de gente y llenas de ruidos por todas partes .Nadie lo comprendía, ni él al resto .Sus pensamientos eran diferentes, eran tristes ,eran fríos .No quería a nadie, estaba frío y se ahogaba con las risas de los demás .Ver a otro niño reír le producía un vacio en el alma ,un dolor insoportable, un sinvivir. Tenía que morir, estaba seguro .Sus pies aun pegados en el suelo ,arañando el aliento de la vida que poco a poco se hundía en su camino despegaron haciéndolo volar puente abajo.
La soledad de tu marcha se viste de terciopelo y sigues arrastrando los pies por las losas empolvadas de mis sueños.Dulce niño que brillas como un faro en la tarde violeta de mi recuerdo… (Recuerdo de Albert F.)
Es duro, pero por desgracia de jovencita viví los suicidios de dos amigos.este me llegó muy adentro.
ResponderEliminarLa muerte siempre nos marca de una u otra forma, si es de manera violenta y además es de un ser querido aún es más dura y triste.
ResponderEliminarQue triste...
ResponderEliminarUna redacción impecable. Dura pero hipnótica a la vez. Me lo he leído 3 veces.
Eres muy buena.
Los suicidios nunca solucionan nada, y ojo, no digo que sea de cobardes, para suicidarte tienes que tener un valor increíble, pero tampoco quiero animar a la gente a suicidarse.
ResponderEliminarLo mejor frente a un gran problema, es coger las pequeñas cosas buenas y hacer una montaña mas grande que el problema.
Por otra parte, me ha gustado mucho Anna, un abrazo ;)
Anna, està mol bè...m'agradat mol. pero m'ha deixat apesadumbrada...es duro vivir y compartir como tú haces el valor y cobardía de otros para suicidarse.
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