MIS PRIMERAS ETAPAS

En lo que entonces era una clínica de Barcelona,cerca de la estación de Sants nací yo un 16 de Agosto por allá los setenta y pico .(El pico no lo digo,es trabajo vuestro imaginar)

Para ser una niña que nació 15 días antes de tiempo medí 52 centímetros y pesé algo más de tres kilos.Imaginaros si hubiera nacido a tiempo.Vine sin sufrir pues a mi madre le practicaron una cesárea ya que la niña,la muy gandula,estaba sentadita dentro de la barriga de mamá.

Llegué a la vida sin llorar, hasta que unos segundos después alguien me dio un zarpazo en el culo. Aunque la parte de mi cerebro donde se guarda la memoria no me deja recordar el momento en cuestión, sé del cierto que lloré, y mucho.La lástima es que tampoco recuerdo la cara del médico, aunque si tengo su nombre y sé donde vive.

Ya algo más crecidita, contando con cuatro años, entré en el colegio más pijo de mi ciudad. Mis padres por aquel entonces supongo que pensaron que “contra más cara sea la escuela, mejor será”.Allí conocí a Santi,mi primer novio.El amor era tan profundo que una vez se cayó del tobogán abriéndose la cabeza y la que lloró fui yo ante el asombro de las maestras.¡Ai el amor!

Pasaron dos años y  corté con Santi.Supongo que me di cuenta que era demasiado joven para tener una relación.El pobre chaval lo pasó mal,pero ya lo dicen: las mujeres somos así.

A los ocho años el director llamó a mis padres para decirles que su hija era una criatura especial ,con una inteligencia por encima de la media y que a partir de entonces una hora a la semana la pasaría en manos del psicólogo del centro .Y así fue .Junto con otra compañera eramos sometidas a extrañas pero a la vez agradables pruebas  con aquel hombre alto y delgado que estaba en posesión del melón más grande y desproporcionado que he visto en mi vida.Un señor digno de una película de terror.

Y si queréis saber más sobre mi vida, ya sabéis.Estad al quite de este blog,que pronto vendrá la segunda parte.Y no por ser segunda parte va a ser peor.Esto solo pasa en las películas.